Espacios de creación y creación de espacios.
En la incansable búsqueda de lo diferente, llegamos a la conclusión de que para transmitir el feeling de las marcas, el espacio no podía ser simplemente una tienda bonita y simpática. Debía ser un conductor de corriente eléctrica, un espacio que inspire, que cree, que aporte.
Por ello, dividimos el espacio en 3 grandes estancias con tres propósitos muy distintos. En el primer área se establece la transmisión de valores de Sight, la creación del universo estético y la tienda física. Con una distribución equilibrada de estanterías, percheros, vestidores, expositores y mesa central. Todo esto enmarcado en un estilo de decoración industrial.
Es un estilo decorativo que tiene su origen en la arquitectura típica de las industrias, una arquitectura sin pretensiones y un atractivo visual que tiene que ver con la desnudez de su estructura y sus materiales.
En cuanto al resto de proveedores (embalajes, envíos, y el resto de productos y servicios) son locales, ayudando así a generar valor al producto y crear una economía sostenible donde nos apoyamos entre nosotros.
Tras un espacio común de relajación, conversación, estudio y área de trabajo digitalizado comienza el segundo espacio, una tienda que nos retrotrae al pasado. El amor incondicional por la estética, el placer de lo bonito y el descubrimiento del eclecticismo. Descubrí el interiorismo de la mano de Eduardo.
Viajero empedernido en otros tiempos, aficionado al diseño de interiores y restaurador de coches y motos clásicas.
Aquí encontraras antigüedades de todo tipo, colecciones increíbles que hablan de historia, de otras épocas y estilos. Es además también un museo privado y un gabinete de curiosidades y rarezas, emulando aquellos impresionantes gabinetes de curiosidades de los aristócratas del siglo XVI y XVII. Artesanías especiales, cámaras fotográficas vintage, estatuas, pequeñas creaciones, arte, libros, objetos de decoración y moda inusual. Todo, hasta el último rincón, ideado y creado por Eduardo.
El tercer y último espacio es para nosotros. Es un espacio de arte. Aquí creamos, cosemos, pintamos, diseñamos, restauramos, pensamos, tomamos mucho café (pero que mucho) y conseguimos, cada día, ser un poquito más nosotros. El cargador de baterías más abstracto del universo.
De aquí nace el Concept Store:
“Innovadoras y vanguardistas, con una dinámica de funcionamiento diferente, las 'Concept Stores' se han convertido en la experiencia de shopping definitiva.”
Las concept store son unos establecimientos híbridos que ofrecen arte, moda, diseño o restauración. Son una búsqueda continua por mejorar tu experiencia, de llegar a ti, conquistándote y generando más vínculos para poder crear este concepto de unión y creación.
¿Y qué mejor lugar de expresión del estilo industrial que Russafa?
“Ruzafa es la castellanización del topónimo valenciano Russafa, que proviene del árabe y significa «jardín» o «residencia del gobernador», y, de hecho eso es lo que había en este distrito en el siglo IX.”
“Durante mucho tiempo se la conoció como “la terra del ganxo" (la tierra del gancho), debido a que muchos de sus habitantes trabajaron en la recogida de los troncos de madera que llegaban a Valencia provenientes de los Serranos a través del río Turia, para lo cual usaban ganchos. Actualmente, esta denominación todavía está patente en muchos de los nombres de comercios y casales falleros del barrio.”
Si te has saltado estos dos pedacitos de historia, te contacte la mía personal.
Nacida (casi) y criada en este barrio, lo he visto florecer y enorgullecerme de la belleza y carisma del barrio y de los vecinos que la habitan.
Barrio marqués, y barrio obrero. Esta herencia la recibimos como una arquitectura y espacios increíbles, genuinos y cargaditos de historia, te contaré la mía personal.
Nacida y criada en este barrio y sus alrededores, lo he visto florecer y me enorgullece su belleza, su carisma y sus vecinos. Barrio marqués, y barrio obrero. Esta herencia la percibimos en una arquitectura y espacios increíbles, genuinos y cargaditos de historia.